Desde pequeña he tenido curiosidad por los hippocampus o caballitos que surcan los mares. Seres casi diminutos, aparentemente frágiles y con un modo reproductivo que siempre despierta curiosidad. El macho porta los huevos de las crías hasta la eclosión de éstos. Sin duda es totalmente diferente al resto de seres vivos, y por su singularidad me llama la atención. Tanto es así que me he aventurado a realizar un proyecto ficticio de packaging con el caballito de mar como protagonista.
Creé el siguiente moodboard para inspirarme. Tiendas y calles que visité este verano, colores y elementos que encontramos a nivel del mar.
Y el resultado final fue un packaging fresco y veraniego, muy apropiado para las tiendas que se encuentran cerca del mar.
Puedes ver el proyecto completo y el resto de mi portfolio en Domestika.